COLECTIVO

Guadalajara, Jalisco, Mexico
Somos un grupo de amigos amantes a la fotografía y a la bicicleta, de ahí el nombre de este blog. Cada domingo vamos a pedalear por diferentes rumbos de la ciudad y fuera de la misma. Hacemos tanto ciclismo de montaña, ciclismo urbano y biciturismo. Con esto queremos fomentar el uso de la bicicleta como una herramienta viable de movilidad, de salud y de diversión. ¡¡¡Animate a rodar con nosotros, saca tu bici a pasear!!! Escríbenos a camararodante@hotmail.com

martes, 6 de agosto de 2013

CRÓNICA DE UN PASEO ANUNCIADO: A LAGOS EN BICI, POR MÓNICA GÓMEZ ZEPEDA...


La cita era el sábado 3 de Agosto a las 10am en el Parque del Refugio, para salir rumbo a mi primer paseo ciclista con Cámara Rodante … pero después de preparar algunos vivieres para la cena del sábado y buscar virotes del día para los lonches del camino, no logramos llegar a tiempo… mi hermana Roon y yo, llegamos barriéndonos poco antes de las 11am, justo apenas para subir las bicis al remolque que Chupetas y Rodrigo amablemente facilitaron y condujeron hasta Lagos de Moreno, para que los de a pie, pudiéramos tener nuestras bicis para el recorrido. Y bueno, llegar a ese día equipada de manera digna, fue ya todo un triunfo… pues en previas rodadas urbanas mi hermana me tuvo que ataviar con bicis y equipo que de a poco a poco me fue prestando. Pero para esta rodada ya era justo y necesario estrenar por lo menos la bicicleta de montaña! … Heeee! Bien escojidita, eso si, asesorada nada menos que por el meritito Carlos Ibarra, autor intelectual del paseo, que en colaboración con el grupo Lagos en Bici, encabezado por Ariadna Aguiñaga, hicieron posible el recorrido en Lagos de Moreno, pueblo mágico de nuestro estado de Jalisco. Salimos pues del Parque del Refugio a las 11am junto con Carlos y Moni Ibarra y guiados por el remolque que a leguas se le notaba que llevaba las bicis de Cámara Rodante… Así mismo, el remolque fue guiando a la caravana, conformada por numerosos vehículos desde Guadalajara, hasta el balneario Kikapu, en Lagos de Moreno, que fue la sede del campamento donde nos hospedamos.


Ya de camino, hicimos una escala técnica para cargar gasolina y víveres y enseguida continuamos por la autopista una hora en calma, cuando de repente… o sorpresa… el súper remolque ciclista experimento cambios climáticos y una falla en la transmisión nos detuvo por unos minutos. Una vez resuelto el tema, la caravana de manera que entramos a Lagos pasaditas las 14,15hrs.


Llegamos a instalarnos en el balneario alrededor de las 15hrs. encontrándonos ya con algunos compañeros de Cámara Rodante que se adelantaron. Nos condujo nuestra anfitriona Ariadna al área de campamento, donde un lago con patos y una amplia área verde arbolada nos esperaba para acampar a su sombra. Cada quien eligió su mejor ubicación y armamos la casa de campaña más rápido de lo que me imaginé –pues nunca había armado una- pero en equipo rápidamente se resolvió el montaje del campamento. Una vez instalados, nos dispusimos a convivir un rato, y descansar bajo la sombra de los árboles, ya fuera en sillas pleglables, en el pasto o en hamaca. Otros fueron a darse un chapuzón en la alberca, aprovechando las instalaciones de Kikapu y el clima agradable.


Como cada año, Lagos de Moreno celebra las fiestas de Agosto, y esta fue una ocasión especial por sus 450 años de fundación. Así que dentro del marco de sus festividades, se armó esta peculiar rodada, con dos rutas, una el sábado por la noche con 19km en el interior de la población, y otra el domingo por la mañana en sus alrededores, con 50km.

 

Fuimos guiados por los miembros de Lagos en Bici: Juan Carlos Valdivia, Beto Calderón, Mauricio Pérez y Ariadna Aguiñaga. También nos dieron soporte en las Barredoras: Marco Antonio Santos, Diego Larios y Óscar de Santiago. Todos muy amables y prestos a atender, a quiénes les agradecemos su hospitalidad, así como al director de tránsito Miguel Ángel Cordero por su apoyo. En comitiva rumbo al centro de Lagos de Moreno, salimos a las 19.50hrs del Balneario Kikapu, donde fue posible contar a 90 ciclistas que participaron de Cámara Rodante, así como visitantes de Morelia y la ciudad de México. Pero antes de salir, estando ya enfilados y yo con el Jesús en la boca de los nervios, no me podía faltar: “Maeeeeeestraaaa… cómo estaaaaaá…!?” Me dio mucho gusto encontrarme –como siempre en los grandes eventos masivos a los que acudo- a un exalumno de mi escuela, Luis Armando Díaz (LADO) quien gustoso me identificó de entre el grupo y me saludó; ahora fue compañero de rodada, y ya colega, me acompañó en varios tramos de las rutas, asesorándome también ante mi novatez ciclista.

 

Comenzando pues la rodada… iba yo súper nerviosa, fue la primera vez que rodé con bici de montaña en senderos rústicos… y bueno, el grupo pagó el precio, pues iba bien, iba bien, y en el primer charco me detengo en seco! Me panique bien feo… pero pude comprobar que Cámara Rodante esta formado por personas súper respetuosas y pacientes, pues aunque repetí el estroperio varias veces el sábado (…hic!) solo recibí buenos consejos, para mejorar como ciclista. Lo cual agradezco infinitamente, pues hoy me siento mucho más segura para conducir una bici. Hubo varios angelitos que me estuvieron aconsejando: “sube el asiento”… “frena antes de detenerte y bajar la pierna”… “usa el buff para el viento helado y la tierra”… “cambia tus velocidades, flojito para cuesta arriba y caminos de tierra suelta, durito para adoquín y pavimento”… entre otras cuantas sugerencias, que cabe mencionar, todas ellas me las habían dicho Roon y Carlos… pero ya montada en la bici y sintiendo las condiciones especificas al conducir la bicicleta de montaña, pude experimentar las indicaciones más claramente.

 

Una vez llegando a la plaza se nos unieron los ciclistas anfitriones de Lagos en Bici, de León y en especial recuerdo a un señor de Lagos que llevaba a su niña en un remolque pequeño que jalaba con su bici, y también recuerdo al niño Alexis que nos acompañó en una silla de ruedas adaptada a manera de triciclo conducida por su papá, José Jesús Flores Gómez, a quiénes recordaré siempre como ejemplo de tenacidad y unión familiar. También se unieron varias familias, damas, jóvenes acompañadas por sus hijas e hijos, algunos caballeros así como diferentes grupitos de jovencitos muy alegres y chacharacheros. Esa noche, el ambiente festivo de Lagos de Moreno, se vio complementado con nuestra visita, ya que en más de algún lugareño, provocamos el semblante de asombro pues para entonces éramos ya más de 200 ciclistas reunidos rodando por sus calles, la mayoría bien equipados, luciendo bicicletas, cascos y guantes.


Visitamos varios templos y después del descenso por el Calvario, se destinaron unos minutos al descanso en la explanda, para tomar algunos alimentos y bebidas típicas de la región. Enseguida continuamos de regreso al balneario, de camino ya casi para llegar, hicimos una escala técnica para comprar –nunca falta que se nos olvidó-un poquitín de aceite y bebidas. En el campamento nos esperaban varios asadores móviles, estratégicamente acomodados, para armar la cena y la convivencia típica después de una sana rodada.


Con todo y un poco de cansancio por el largo día, en varios grupos se armó la cena, los caballeros encendieron el carbón, y prontamente se llenó la atmosfera del delicioso olor a carne asada. Compartimos la cena, un poco de bebida, y cotorreamos un rato. También para sorpresa nuestra, se asaron tuétanos –los favoritos de nuestro líder Carlos Ibarra- y muchos nopales, que bien complementaron a quienes no gustan de la carne o les había quedado algún huequito. Me marcó el comentario de un chavo que dijo: “haaaaaaaay que bonitoooos están los colores de su parrillaaa …” al ver combinados a los frijoles, al rojo de la carne y el verde de los nopales, junto al lado del guacamolito y las salas previstas. Finalmente unos bomboncitos asados al carbón, aunque no hubo tiempo para fogata, mi hermana Roon se las ingenió para asar unos cuantos. Esa noche nos dormimos tarde y muy a gusto. Entre risas que se escapaban de una que otra casa de campaña.

DOMINGO 4: RODADA POR LOS CAMINOS DE LAGOS…


Pero estábamos avisados que el domingo había que madrugar. Desde las 6am escuche mi alarma y claro, la volví a apagar. Me dolía todo el cuerpo, incluso músculos que ni siquiera sabía que tenía! Y una vocecita jubilosa decía a lo lejos: “es hooooora de levantarse”… “arribaaaa”… “vaaaámonos”… una y otra vez. Incansable, Carlos Ibarra ya listo desde temprano, nos arreó pacientemente hasta que uno a uno fuimos saliendo de nuestras casitas para ver el rayito de sol, con sentimientos encontrados, nos levantamos con gusto por la siguiente rodada, pero cansancio por la anterior.

 

Nuevamente guiados por Lagos en Bici, tempranito salimos rodando al centro para encontrarnos con otros grupos ciclistas, en la misma plaza de Lagos, donde nos dieron indicaciones y presentaron a los guías del día. Y donde por supuesto no podía faltar “El Grillo” quien con su peculiar personalidad imprimió su estilo a la rodada, ya que en el decir de los ciclistas locales “una rodada sin “El Grillo” no es rodada”.


Después de la foto oficial de Cámara Rodante en dicha plaza, ya con el entusiasmo de las primeras pedaleadas matutinas, la nutrida caravana de ciclistas abandono el centro bajando por el puente y saliendo paralelos al río, la travesía recién comenzada, se vio interrumpida por el primer ponchado! pero como es tradición, se le esperó pacientemente a que resolviera el problema técnico para reanudar con la ruta, que trazo Juan Carlos Valdivia del grupo Lagos en Bici. Luego de unas vivas y porras improvisadas por Demetrio Azuela, dedicadas a Guadalajara, León, Lagos, Morelia, DF y unos distinguidos visitantes desde Corea del Sur, se continuo el paseo ciclista rumbo a algunas de las haciendas de Lagos.


Mi tramo favorito fue donde después de un sendero estrecho, pasamos bordeando un corral de vacas, distrayéndolas y remoliéndoles el almuerzo, en auténtica convivencia con el ambiente rustico de Lagos. Continuando por otro largo sendero que tenía dos vereditas que hicieron las veces de camino para las bicis en pares. Me encantó este tramo, y más me encantó terminarlo sin interrupción, pude conducir mi bici de montaña con certeza gracias a las instrucciones de mis compañeros, evitando detenerme y atrasar también al resto del grupo. Gracias por motivar y apiadarse de los menos expertos! …como yo comprenderé.


El paseo ciclista se desarrollo por senderos que atraviesan el paisaje rústico de Lagos de Moreno, reverdecido por las últimas lluvias y enmarcado por un cielo despejado que permitió disfrutar del recorrido, en un día luminoso y colorido con las flores del campo.

 

Pero como era de esperarse, dada mi novatez, por ahí del kilómetro 25 del recorrido, me ganó una cuesta arriba y me dí para abajo. Mis piernitas ya no daban para más aunque mi corazón quería continuar. Me vi en la necesidad de hacer uso de la barredora y pedir auxilio para continuar a bordo del vehiculo, donde ya venían dos compañeras y más adelante se nos unió mi hermana. Nos perdimos de visitar las Haciendas, plato fuerte del paseo, sin embargo, me siento satisfecha de haberme superado en este ámbito de mi vida, pues para ser la primera rodada en el campo, considero haber tenido un desempeño satisfactorio, pues también es sano saber identificar los límites del organismo para no causar daños extremos, y procurar mejorar la condición física general para no dejar futuros paseos a medias. Aparte, me encantó la actitud de ánimo de los compañeros ciclistas que me echaron porras para intentar continuar, pero mis piernitas ya no podían, así que por esta vez, tuve que claudicar.


La caravana ciclista continuó para las haciendas, que yo conoceré gracias a sus fotos… Nos reunimos todos luego en la presa La Sauceda, donde fue posible tomar varias fotografías, descansar un poco, recuperar energías y tomar algo en la tiendita de la esquina.


La última parada del recorrido fue frente al campo de béisbol “El Sabino”, nos detuvimos a comer bajo “El Ahuehete” un árbol de más de 400 años de vida, que ha sido testigo de numerosos hechos históricos, como nos lo comentó el cronista Mario Gómez Mata. En esta ocasión, el antiquísimo árbol brindo su sombra y cobijo para albergar al comedor del grupo ciclista. La comida fue auspiciada por el Comité Organizador de las Fiestas de Agosto, en Lagos de Moreno, a través de Heladio Ruiz, Verónica y familia, quiénes se distinguieron como excelentes anfitriones al recibirnos y guiarnos. También nos recibió calidamente Álvaro, el amable propietario del predio donde crece “El Ahuehete”.


Me gustó mucho este detalle del arbolito, me sorprendió su edad pues puedo imaginar todo lo que ha visto y oído, así que, como me enseñaron a respetar a mis mayores, no pude resistir la tentación de abrazar al amigo “Ahuehuete” felicitarlo por su no cumpleaños y pedirle energía, así como encomendarme a la madre naturaleza para el resto de mi vida, a través suyo. Su olor era hermoso, peculiar y fuerte. Pude sentir que le dio gusto.

 

Después de comer, ya una vez repuestita con la rica comida y bebida, continuamos rodando de regreso rumbo al campamento, y en los primeros 50mt de rodada, la última ponchadura! Pues al amigo Rodrigo le pasó una falla técnica, que nos entretuvo unos minutitos. Luego del arreglo, seguimos por el sendero rumbo a la carretera que nos llevaría al balneario. Dios, que impresión rodar por carretera, se me bajó la sangre a los pies del estrés, sentir los camiones, los trailers y los autos pasar tan cerca y tan rápido, fue impresionante! Bueno, pues aguante un buen tramo de carretera, bien y de buenas, pero la subidita a la glorieta del entronque del libramiento, me hizo de nuevo ir para abajo de la bici y remolcarla a pie un tramo, en lo que la barredora hizo lo suyo para acercarme al campamento. Que aunque llegue en la barredora, llegue contenta con el paseo en general.

Dormí un ratito para recuperarme, pero la lluvia me despertó, aunque su visita fue discreta ya era apremiante recoger el campamento para disponernos a regresar. Rápidamente recogimos, empacamos todo y montamos en el auto para salir de regreso. Como viajábamos mi hermana y yo con el organizador Carlos y su hermana Moni, mi tocaya, pues como es debido, esperamos a que todos estuvieran en camino de regreso para nosotros también agarra camino. Entonces pudimos ver como todos regresábamos con una sonrisa en el semblante, con la satisfacción personal de haber realizado dos rodadas en una visita a Lagos, el sábado 19km y el domingo 50km, nada mal para un fin de semana, al estilo de Cámara Rodante!



¿Que si quiero repetir?

¡Claro que sí!

¡Excélsior… siempre arriba, siempre adelante!

Por Mónica Gómez Zepeda 
Cámara Rodante

4 comentarios:

  1. Felicidades,bonitas imagenes y buenos videos,,,saludos desde las Vegas!

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  2. Felicidades,bonitas imagenes y buenos videos,,,saludos desde las Vegas!

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  3. muy buena cronica Mony felicidades por tu primer rodada

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  4. Felicidades Moni, que chido se la pasaron ya me tocará visitar Lagos en la rila, un abrazo y ya pronto estaré de regreso en la bicicleta, solo una semana más :D
    Felicidades a todos los Cámara Rodante's

    Fidalgo

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