COLECTIVO

Guadalajara, Jalisco, Mexico
Somos un grupo de amigos amantes a la fotografía y a la bicicleta, de ahí el nombre de este blog. Cada domingo vamos a pedalear por diferentes rumbos de la ciudad y fuera de la misma. Hacemos tanto ciclismo de montaña, ciclismo urbano y biciturismo. Con esto queremos fomentar el uso de la bicicleta como una herramienta viable de movilidad, de salud y de diversión. ¡¡¡Animate a rodar con nosotros, saca tu bici a pasear!!! Escríbenos a camararodante@hotmail.com

sábado, 16 de enero de 2016

"PAISAJE AGAVERO, ARQUEOLOGÍA Y AMISTAD PARA INICIAR UN AÑO MÁS". CRÓNICA DE ANA CLAUDIA NEPOTE.


¿Qué mejor manera de iniciar un año nuevo que a vuelta de rueda? En diciembre pasado, mi amiga brasileña Luisa Massarani visitó Guadalajara cuando asistió como invitada del programa “La FIL también es Ciencia” que por segundo año consecutivo se realizó como parte de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (http://www.fil.com.mx).

Las actividades académicas le dejaron poco tiempo para que ella conociera la ciudad y sus alrededores, así que acordamos que volvería a principios de año para iniciar una colaboración de investigación y celebrar su cumpleaños con un paseo ciclista.


Nuestros planes de viaje coincidieron con la primera rodada de 2016 que organizó Cámara Rodante hacia la zona arqueológica de los Guachimontones, descubierta en los años setentas y fue ocupada entre los años 200 y 400 d. C.


El paseo en bici inició en el poblado de La Vega que se localiza a 60 kilómetros de Guadalajara. El recorrido inició por una terracería que nos condujo hasta Los Hervores donde corre un arroyo de agua caliente.

Continuamos el recorrido entre cultivos de cañas y maíz hacia el poblado El Amarillo para después rodar a través de La Mora, lugar en el que nos encontramos con una cabalgata en nuestro camino.


En la plaza principal de Teuchitlán hicimos un breve descanso para subir hacia la zona arqueológica de los Guachimontones (http://www.inah.gob.mx/es/zonas/176-zona-arqueologica-teuchitlan-o-guachimontones).


El tiempo apremia, y más cuando el grupo de ciclistas que integró este paseo lo conformábamos más de 120 personas. Así que de acuerdo con el plan, teníamos que reencontrarnos en la plaza principal de Teuchitlán para seguir rodando hacia la presa de La Vega y finalizar el paseo. Sin embargo, Luisa y yo teníamos otros planes.


Más allá de Cámara Rodante


Nosotras nos despedimos de la amable compañía del grupo justo a un par de kilómetros del poblado de El Amarillo. Ellos continuaron su recorrido hacia La Vega y nosotras rodamos hasta encontrar las Vías Verdes (también conocidas como Rutas Creativas en su más reciente versión) que consiste en un interesante programa que busca promover el turismo natural y cultural a través del transporte sustentable basado en la reutilización del patrimonio ferroviario.


Aunque ya había escuchado hablar de las vías verdes, no había tenido oportunidad de rodar en ellas. Así que Luisa y yo continuamos nuestro viaje desde El Amarillo hasta Etzatlán a lo largo de 26 kilómetros de camino por una ciclovía tranquila, con pocos desniveles y alejada de la carretera.


Quedamos gratamente sorprendidas con este programa que promueve la Secretaría de Cultura del Gobierno del Estado de Jalisco. A lo largo de nuestro recorrido nos encontramos con algunos otros ciclistas que también disfrutaban de la ruta, pero sobre todo, nos encontramos con pobladores locales que utilizan la vía para hacer ejercicio o disfrutar de una caminata al atardecer. En el camino aproveche una breve parada de descanso para comprarme un delicioso tejuino con limón en San Ignacio Portes Gil.


Nuestra siguiente parada fue en Ahualulco de Mercado para luego, finalizar en Etzatlán, en la antigua estación de Ferrocarril que ahora se utiliza como un pequeño museo en el que se puede apreciar la exposición fotográfica “Etzatlán, a través del tiempo”. Después de pedalear alrededor de 60 kilómetros, nos faltó energía y tiempo para subir un cerro y visitar el mirador de Etzatlán. Llegamos dispuestas a comer una buena cena acompañadas de una rica cerveza helada y descansamos en una cómoda casona construida en el siglo XVIII.


Al día siguiente, nos levantamos muy temprano para recorrer nuestros próximos 20 kilómetros en una helada mañana. Así con frío, llegamos a Magdalena, Jalisco, otra importante población con producción minera de donde se extraen ópalos que han sido considerados como “la joya de la Ruta del Tequila”. Ahí comimos un delicioso desayuno en la tradicional Fonda Lupita para calentarnos un poco y emprender nuestros últimos 19 kilómetros por carretera hacia Tequila, uno de los siete pueblos mágicos de Jalisco.


Con una deliciosa nieve de garrafa sabor Tequila concluimos nuestro recorrido de 100 kilómetros en dos días por la Ruta del Tequila. Viajar en bicicleta nos permitió conocer nuevas personas y valorar el trabajo que hacen los organizadores de Cámara Rodante por promover el disfrute y el conocimiento del patrimonio natural y cultural de Jalisco al ritmo del pedal.


Confío en que mi amiga Luisa visitará México nuevamente, pero espero que guarde en su memoria los paisajes jaliscienses y el gran placer de viajar en bicicleta a ritmo propio.

¡Muchas gracias a Cámara Rodante por un agradable paseo dominical!

Crónica Ana Claudia Nepote
Cámara Rodante

1 comentario:

  1. Que buen paseo. Y recuerden que los amigos que se hacen en el ciclismo nunca se olvidan. Saludos desde Chapala Jalisco (bttchapala.blogspot.com)

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