COLECTIVO

Guadalajara, Jalisco, Mexico
Somos un grupo de amigos amantes a la fotografía y a la bicicleta, de ahí el nombre de este blog. Cada domingo vamos a pedalear por diferentes rumbos de la ciudad y fuera de la misma. Hacemos tanto ciclismo de montaña, ciclismo urbano y biciturismo. Con esto queremos fomentar el uso de la bicicleta como una herramienta viable de movilidad, de salud y de diversión. ¡¡¡Animate a rodar con nosotros, saca tu bici a pasear!!! Escríbenos a camararodante@hotmail.com

miércoles, 11 de mayo de 2016

DIVERTIDA RODADA ENTRE AGUA Y TIERRA POR ARENAL JALISCO. CRÓNICA DE ANA MEDINA.


Para mí todo comenzó el sábado por la noche con la propuesta de ir a pasear con Cámara Rodante a Arenal Jalisco, la cual acepté sin titubear. A la mañana siguiente al llegar al punto de partida, salimos puntuales sin saber que poco más adelante nos toparíamos con un embotellamiento en el cual duraríamos un buen rato avanzando muy lentamente, ya que hubo un maratón.


Al llegar al pueblo estacionamos los vehículos en un restaurant “La Tequilera”, nos alistamos, dieron indicaciones del paseo y nos tomamos las fotos de grupo antes de partir.


Comenzamos el paseo en terracería, pasando por sembradíos de agave, cuando entramos al pueblo en un camino empedrado y con varios topes, al finalizar el tramo por el pueblo, nos detuvimos un momento frente a un pequeño lago, para tomarnos fotografías he, hidratarnos.


Durante el camino subimos a un puente, “que bonito se veía todos en las bicicletas en fila atravesándolo”. Llegamos a un tienda y algunos compramos víveres, recargar energías, tomarnos fotografías y continuar con el paseo.


En el camino Don Lino notó que algo venia fallando en mi bicicleta, por lo cual ajustó el freno delantero, ya que estaba pegado y por eso iba haciendo un ruido extraño además de que pedaleaba con dificultad, algunos compañeros de rodada también sufrieron ponchaduras durante el paseo y uno sufrió un accidente del cual espero que se esté recuperando lo mejor posible.


Seguimos el camino de terracería y entramos a La Primavera, llegando a un punto en el cual teniendo que cruzar un charco de tamaño considerable, nunca lo había hecho, algunos compañeros me animaron, por lo que cuando me decidí lo hice sin mayor dificultad, a lo que me dicen, “falta cruzar el rio”, por lo que no sabía que esperar, pero igual muy animosa por el nuevo reto.


Seguimos rodando entre agaves, algunas subidas, bajadas y mucha arena, la cual dijo un compañero, James, “te cobran $2.00 cada vez que te caigas por que escasea la arena”.

Antes de llegar al rio tuvimos que pasar las bicicletas por cercos ya que no se podía de otra manera seguir el paseo, donde se muestra el compañerismo y apoyo entre todos, para poder pasar las bicicletas y nosotros.



Antes de que me animara a cruzar el rio, noté que mi freno delantero falló de nuevo, no me animé a cruzarlo así, Marco se ofreció a ayudarme a ajustarlo, mis compañeros muy animosos todos lo cruzaban varias veces, unos se quedaban a la mitad otros si lo cruzaban todo sin mayor problema.


Cuando quedó mi freno, también lo crucé lo cual me resultó muy divertido. Tomamos un leve descanso y a seguir pedaleando por la orilla del rio. Hubo un momento en el camino que algunos parecía que traían llantas para arena, ya que pedaleaban sin mayor dificultad entre arena muy suelta y otros traíamos kilos de arena en los tenis, lo cual me resultó muy gracioso.


Cuando llegamos al final del paseo de ida, era una parte del rio en la que se podía meterse como si fuera una alberca pequeña, a lo que muchos de mis compañeros se dieron un buen chapuzón y otros se refrescaron y aprovechamos para quitar la arena en los tenis, para mí me faltó tiempo para seguir disfrutando del rio.

La mayoría ya se había ido, cuando apenas me estaba alistando para irme del lugar, y muchos ya habían comenzado a subir un tramo algo largo y empinado, a lo lejos vi a mi primo Rubén que subía caminando con la bicicleta, a lo que pensé “racionemos la energía” y subí una parte del camino igual. 

El regreso fue más leve de lo que esperaba, pasamos por sembradíos de caña y por el pueblo, muy bonito y pintoresco el paisaje, entre cultivos de caña quemada, árboles y terracería, eso sí, mucho calor. En el camino me acompañaron Marco, Don Lino y James quienes me daban ánimos. Camino a nuestro punto de partida ya entrando al pueblo, no pensaba en otra cosa más que en una rica rusa en cantarito para refresacarme.


Al llegar muchos de mis compañeros ya habían llegado, al restaurant, guardamos las bicicletas y seguimos y pasamos por unas refrescantes bebidas. Conclusión, fue una experiencia muy bonita, divertida, mucho compañerismo y muchas fotografías, cámara rodante, seguiré asistiendo a más paseos con ustedes, aumentar de nivel e ir a más rodadas.

Crónica de Ana Medina
Cámara Rodante

No hay comentarios:

Publicar un comentario