UNA RODADA DE MUCHO PULMON.

Rodando con los MTB Primates y Cámara Rodante en La primavera, el pulmón de Gdl.

Inicia mi travesía, viendo el recorrido que se había trazado y acordado, gracias a la invitación de MTB Primates, de rodar en La Primavera, sonaba bastante pesada o quizás imposible para la condición que tengo y el poco tiempo que llevo practicando el ciclismo de montaña, imaginarme recorrer cuarenta y tantos km en terreno rustico, o el llegar al Refugio para irnos a La Primavera por las calles de esta gran metrópoli, (ni pensarlo), digo, eso fue lo que se me vino a la mente, sin embargo, el salir a rodar los domingos te llena de energía y vitalidad para aguantar la dura jornada de trabajo y el sedentarismo que representa estar detrás de un escritorio.

En fin, salgo dispuesto a una cosa, divertirme y ejercitarme un poco, se me ocurre la “magnifica” idea de irme de mi casa (Zona belenes) por periférico hasta Mariano Otero y de ahí agarrar camino hacia los postes que es el inicio del bosque, pensando que no alcanzaría al grupo y que me regresaría de ahí a descansar a mi casita, una vez en dicho punto y viendo que el reloj marcaba las 8:45 am decido subir hacia el 8 y medio, pensé, un poco de tierra no me caería mal, subo con las pocas ganas que me quedaban y llego al puesto de jugos y fritangas.



Espero 10 mints. Y pienso en regresar, cuando me encuentro a Raúl (recién integrante de Cámara rodante 2da. Rodada) y unos minutos más tarde a Oscar y Bernardo acompañados de otros compañeros cuyos nombre no los recuerdo (Sorry) y los MTB primates, como también a Víctor (nuestro guía en esta ocasión) y su Esposa, todos con un ánimo y energía tremenda no importando que ya venían algunos de ellos desde el refugio 18 km aprox. De rodada, fue entonces que pensé yo rodé 14 hasta este punto, los veo a todos frescos y animados, pues porque no, vamos a acompañarlos a conquistar La primavera.

Esperamos a Magui que venía llegando al 8 ½, y emprendimos al bosque un lugar hermoso con un aroma único, la vegetación impresionante el camino bien cuidado lógico con su grava suelta, tierra floja, piedras, hojas, etc. Los ingredientes perfectos para sentirse en contacto con la naturaleza, para mi fortuna recorrimos muchas bajadas que invitan a soltar los frenos y olvidarse de ellos por unos minutos, una que otra subida sin mayor complicación en el 1er y 2do cuarto del recorrido, todo marchaba muy bien, veníamos un grupo de alrededor de 20 personas (no las conté) y todos muy buena onda cuando a nuestro guía se le poncha la llanta trasera, tomamos nuestro primer descanso para esperar la reparación de la misma, con un control maestro y sin esforzarse mucho Víctor reparo su caballo de acero en pocos minutos, como que pensó que estábamos en carrera, ya salidos de PITS, en bandera verde, reiniciamos nuestra aventura, para mala suerte 30 mts después y nuevamente bandera amarilla que indicaba otro percance, a otro amigo se le revienta la cadena es ahí donde sale del taller Bernardo con un control absoluto de la situación con corta cadena en mano realiza la reparación corta pega una alineada etc. y a los 10 minutos a lo mucho nos dan bandera verde, salimos nuevamente de pits, afortunadamente agarramos bajada y disfrutamos de la velocidad.

Pasamos un llano creo que era privado como la mayor parte del bosque porque abrimos puertas para ingresar y para salir de este lugar, lo utilizamos como camino para agarrar la vereda pública, hicimos una pequeña parada para compactar el grupo y para prepararnos para lo que venía, una subida no muy inclinada pero si con la tierra muy floja que hacía difícil el caminar de nuestros bólidos, subimos pedaleando, caminando, arrastrando la bici, como fuera lo importante era continuar, e íbamos ilusionados porque se nos indico que a pocos metros ya estaba la tiendita de abastecimiento y que era el lugar donde íbamos a descansar , yo creí que si eran pocos metros pero la verdad es que eran muchos metros, hasta que por fin como si fuese un oasis vimos a lo lejos el citado lugar, descansamos unos minutos nos refrescamos platicamos algunos puntos del camino, e hicimos un recuento de los daños hasta el momento, un ponchado, otro con la cadena rota, y uno más que no se bien que le paso a su bici pero que no quiso continuar y tomo otra salida para no quedarse parado en algún punto más adelante.


Fue entonces que pregunté e investigué si ya mero terminábamos y me informan que si, ya van 30 km cuando en total son 40 pensé ya chin…….gue pero no, resulta que lo faltante es rumbo a torre 1 que es pura subida con tierra muy floja y pesada pero pues ya estaba mas pa’lla que pa’ca, así que ni modo a terminar esto como pueda, después del descanso y la hidratación correspondiente, iniciamos la subida no sin antes pasar por un pequeño acantilado que te llena de adrenalina aunque muy corto pero excitante, comenzamos a subir y a un compañero desafortunadamente le da un calambre en el muslo izquierdo pero gracias a que lo esperaron y ayudaron a subir partes a pie, otras arriba de su caballo de hierro, pero finalmente pudo seguir adelante, casi a mitad de la subida de la torre uno llegamos a una intersección que para mi fortuna era el punto donde iniciaba la bajada hacia el autódromo casi punto final de nuestro recorrido, me dispuse a disfrutar la bajada como dios manda velocidad y adrenalina baje con otros dos compañeros.



Magui que venía adelante tuvo una caída a lo cual no pude frenar antes y por no impactarla termine mordiendo el polvo también, afortunadamente no nos golpeamos ni siquiera nos raspamos gracias a los guantes pero si mi corcel sufrió algunos daños que no requieren más que de uno poco de ajuste y cambiar y quitar partes, a lo que seguimos para terminar el recorrido cruzamos al autódromo que para mi suerte (me gusta el automovilismo) se encontraba un Renault Clio en prácticas me detuve a observar la velocidad y como agarraba las curvas como si estuviera en la nascar México, acabo su práctica y pudimos invadir la pista para salir a postes y con ello concluir nuestro recorrido, esperamos a los que venían atrás y nos despedimos.

Muy buena rodada que tuvo de todo, Subidas, bajadas, Tierra, asfalto, pista de carreras de autos, caídas leves, desgarrados, y mucha diversión. Gracias a MTB Primates por su invitación, a Víctor por lo ruta que nos enseño, a Cámara Rodante por su amistad, a Sara que llevaba su camioneta e iba a tabachines por lo que nos dio un rait al periférico a algunos y a mi hasta una cuadra de mi casa.

Edgar Fidalgo