“Se pierde de mucho, quien no disfruta dejarse llevar y en el camino aprender” llegar alto, llegar lejos y llegar donde pocos pueden, es la primer maravilla que me acerca y apasiona de mi potro metálico, no son pocas las aventuras que a su lado emprendo y resultan todas una suma de viajes en un camino aun mas largo.
La aventura esta vez apuntaba a una cima fría y alta, la preparación, requería desde la condición física, pasando por la anímica y psicológica, para estar listos y puntuales, este año decidimos estar en ciudad Guzmán desde el sábado, así podríamos dormir allá y a la mañana reunirnos con el grupo. pero esto no nos libro de incidentes, desde el clásico caso de no encontrar el hotel hasta el trago amargo de estar a punto de ser multados por dar una vuelta prohibida en el centro de CD Guzmán y entre un policía que solo quería mordida y la excusa “es que no somos de aquí” al fin pudimos llegar al hotel (sin dar mordida ), ya para relajarnos salimos a una de las muchas cafeterías que hay en el centro, muy rico por cierto y el hotel muy cómodo y agradable, gracias a los compañeros que llegaron antes y nos reservaron lugar.
Ahora si, listos a las 6 am prestos a reunirnos con los compañeros e irnos en caravana a la entrada del camino “el floripondio” camino al que no pueden acceder vehículos, salvo bicicletas, cuatrimotor o tal vez caballos, reunidos en el punto alrededor de 80 ciclistas de los mas diversos grupos, un poco de frio y otro poco de emoción, breves son las indicaciones, y se da el grito de arranque!
Hay un habito entre los ciclistas, todos los que conozco, al referirse a una subida fuerte repiten tres veces “subir subir subir” y “subes subes subes”, no hay mejor manera de describir la sensación, una subida que apenas da un par de treguas y no muy largas, el camino es por demás hermoso, verde, vivo y hay letreros regados entre los arboles que citan: “el bosque es vida” lo es! apenas en el kilometro 7.36 ya se veían las primeras bolitas de granizo reunidas y al seguir subiendo cada vez mas y mas, llegado el punto en el que es tanto que las llantas de la bicicleta literalmente rompen el hielo y el crujido que hacen es música para los ciclistas, se vuelve pesado y técnico subir pero es una cosa que da gusto de ver, blancos caminos y verdes arboles grandes
Los puntos clave para saber que pronto llegaras y en ese orden son: el mirador, puerta verde, la cabaña, el playón y al final las gloriosas antenas una vez pasado todos los puntos y a puto de llegar a las antenas, empieza una sensación conocida como “mal de montaña” (un par de tragos de vodka y solucionado, hay quienes prefieren whisky) un ultimo esfuerzo para llegar motivaciones personales todas las que se me ocurrían, y al fin llegar! Solo unos minutos para disfrutar la vista majestuosa! mientras se desenfunda lo necesario para abrigarse en la bajada y venga !!! 23 km de bajada!!!! Y una cosa me preocupa, mis compañeros con los que empecé deberían estar aquí cerca a punto de llegar a la cima, pero sucede que una falta de señalización en una intersección hizo que un grupo se dividiera rumbo a otro lado y en ello se les fueron cerca de 10 km con rumbo falso, gracias a los radios lograron enmendar el camino. De este numero de personas, muchos decidieron ya no intentar subir a las antenas, ya porque fuera tarde para hacerlo o ya porque el desgaste físico no se los permitiría, pero de entre quienes si se animaron a intentarlo y subir a toda costa estaba Nancy Gómez, mi bien amada novia, compañera y parte del equipo, que gusto me dio verla subir y una vez que me explico la situación me anime a acompañarla, acordamos un punto (la cabaña) para llegar como limite y que al llegar ahí contaría igual o mas que si hubiera llegado a las antenas ya en el camino me conto de la demás parte del equipo, Sonia Jiménez amiga y compañera decidió llegar hasta el mirador y desde ahí bajar, un excelente punto de ascenso para conocer el nevado en su primer recorrido, muy importante es su manera de verlo “el compromiso es disfrutarlo”
Y ahora si…. Bajar bajar bajar! Se disfruta de una manera especial y envolvente el bosque de esta montaña, es precioso! y llenos de lodo al final abajo ya solo queda celebrar con deliciosa birria y cerveza !
Por Ismael Pulido
Cámara Rodante
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