Fue muy emocionante ver tantas personas reunidas pedaleando, aunque fuimos los últimos en llegar, nos gustó realmente!
Todo el recorrido veníamos pensando que no podríamos, pero eso no nos impidió pedalear. Aunque en la tarde todo el cuerpo nos dolía, valió la pena, da orgullo llegar al final.
Sufrimos con las subidas, sentíamos que no se terminaban, pero aprendiendo a usar bien los cambios se hacía menos pesado, al llegar al diente, fueron unos minutos, todos puestos para la foto , y platicando, después de eso, tratar de llegar al Cuetero!
Llegamos al cuetero y fue tiempo de descansar. Ya descansados, emprendimos el regreso. Ahora si la mayoría eran bajada hay que aprovechar pero se terminó muy pronto nos topamos con una subida muy pesada que nos bajó de la bici ni modo ya será para la próxima y hasta la bici se asustó porque se atoro la cadena de una forma muy rara que no podíamos ni quitarla lo bueno que nos ayudaron y así seguimos pedaleando hasta llegar al Soriana fue muy padre, gracias a los de cámara rodante.
Crónica de Guadalupe Jauregui
Cámara Rodante
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