Y después de 100 días de no rodar en el cerro, que se arma la rodada con mis amigos de Cámara Rodante.
Una vez más, con el gusto de volver a rodar en el cerro y que mejor que con Cámara Rodante y una de mis rutas favoritas, Copala, eso sí , con un plus, porque en esta ocasión nuestros guías, Héctor Esquivel y Francisco Casillas, nos tenían preparado una nueva ruta, una parte de la tradicional, pero con destino a los Patios de Copala, a otro mirador y a una pequeña presa.
Todo mundo nos deleitamos con el paisaje que estuvo a nuestro favor, nublado y fresco; me dio gusto ver que la gran mayoría de compañeros siguen asistiendo a las rodadas y que la camaradería sigue muy bien, de hecho hasta la tiendita oficial de abastecimiento e hidratación lució a reventar.
Fueron 35 kilómetros en total con algunas subidas sabrosas y varias zonas técnicas; lo importante fue que no hubo incidentes dentro de la rodada y todos llegamos bien a nuestro destino. Yo me sentí de maravilla, ya extrañaba la montaña, al principio si venía como “desencanchado” con el manejo, pero después de la primer bajada todo volvió a la normalidad, se dice fácil, pero dejar de rodar más de 100 días, si es algo, pensé que iba a andar fallo de condición pero no, me sentí de lujo y más en las subidas.
Pues no me queda más que invitar a toda esa gente que solo rueda en la ciudad, que se animen a rodar con Cámara Rodante, las rodadas son todos los domingos, saludos y ya listo para la próxima.
Crónica por: Javo Corleone
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