Siendo domingo 31 de marzo y teniendo listo todo el equipo para rodar y tras haberle dado
su ultimo ajuste a la bici, me dispuse a llegar al punto de reunión en el Chedraui de la Av. Vallarta. Como es ley, hay que ser puntuales, estando ahí 15 min antes.
Varios de mis compañeros ya estábamos entusiasmados en el lugar citado, y ya se respiraba un buen ambiente de grupo y así siguió toda la rodada, no tardaron en salir las anécdotas chistosas.
Siendo las 7:00 am y con 20 min, nos dirigimos en caravana a Tequila por la libre, con los mejores paisajes que Jalisco nos regala con los cerros. Llegando a la plaza principal de Tequila, teniendo todo lo pintoresco de un pueblo mágico, nos congregamos alrededor de 70 compañeros ciclistas.
Comenzamos a rodar iniciando el recorrido por los famosos Lavaderos; de ahí continuamos por antiguas ruinas y senderos de terracería, llenándonos la memoria de maravillosas postales de agaves y cerros.
En el camino fuimos cuidándonos uno al otro en cada ponchaduras y fallas mecánicas, ya que, por haber demasiados agaves, pusieron en riesgo las llantas de varios compañeros.
Transcurrido el tiempo y arreglando los desperfectos, llegamos hasta los famosos cantaritos “El Güero” que fue una buena recuperación de energías para el regreso. Estando ahí, un grupo de ciclistas emprendimos el regreso antes que el resto, que para aquellos que aún tenían fuerza, no dudaron en exigirle más a la pierna y adelantarse, concluyendo nuevamente en la plaza principal.
Mis experiencias con Cámara Rodante siempre han sido muy buenas, el ambiente en
grupo es el mejor, no importa que no conozcas a nadie y la oportunidad de viajar y
hacer cicloturismo con ellos no se desperdicia.
Crónica por: David Ruiz.
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