Hace 11 años murió José de Jesús Ibarra, el Poeta del Santuario, un eterno ciclista urbano que deleitaba con sus poemas por la ciudad. Aquí les dejamos algunos de sus textos relacionados a la bicicleta :
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Tapatío:
---¡Ay, cómo lo siento! Guadalajara mía, que todas las calles sean estacionamiento, tanto de noche como de día.
Guadalajara:
---Güero de mi corazón, en ti está la solución, si quieres que sea tu dama inmóvil, móntate en la bicicleta y deja tu automóvil.
Fragmento de DIÁLOGO TAPATÍO
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Don Siriaco, cansado como estaba, dormido se quedó, con gruesos ronquidos a soñar empezó, y soñó que una bicicleta en abonos se compró.
Ahí va pedaleando en su jaca de acero peleando con el mundo entero. Aquí en la ciudad para el ciclista no hay caridad, según mi punto de vista. Todas las calles son sólo para el automovilista, ninguna para el ciclista. Camiones y camionetas nos repegan a las banquetas.
¿Qué no somos todos humanos? ¿o acaso a los ciclistas nos creen marcianos?
Despierta el abuelo gritando, cayendo al suelo: "A quién corresponda, dénos una manos, pensad que todos somos ciudadanos".
(Fragmento de EL ABUELO SIRIACO IGLESIAS)
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Entre calles y banquetas, se sumían las bicicletas en las alcantarillas destapadas que, cuadrillas negligentes, dejaron olvidadas.
(Fragmento de "Carrera contra la Muerte")
Después de una gran subida se encuentra una gran bajada donde se puede reformar la vida el que la tenga desarreglada. Yo no sé si soy artista o poeta, pero sí me siento atleta, andando en mi bicicleta.
(Fragmento “Boca de lobo”)
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“Mi amada cleta, te quiero más que a mi bicicleta.
(Fragmento de Historia de dos amantes)
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