Cuando vi la publicación no estaba 100% convencido de hacer esta rodada, sabía que las rodadas a las torres que se encuentran en el bosque son buenos retos para cualquier ciclista, así que decidí no apuntarme, sin embargo, haciendo una visita al Santuario de la Bicicleta y platicando con Carlos Ibarra, me convenció de ir ya que sería un buen punto de referencia medirme para la rodada que se está organizando de Tepic a San Blas.
En resumen, decidí asistir con la mentalidad de llegar al objetivo y llegué puntual al punto de reunión a las 8:00 am tratando de no pensar en lo que venía, principalmente porque ya tenía muchos años de no subir a una torre.
El objetivo era llegar a la cima, en donde pude encontrar a todo el grupo, no me importó haber llegado al final, lo más importante para mí era haber llegado.
Obviamente una vez estando en la cima de la torre no podía faltar de admirar lo impresionante que es el bosque y como ese pulmón ha mantenido de oxígeno a toda la ciudad de Guadalajara.
Pero lo más importante es reconocer el apoyo que recibí de todo el grupo y con mención honorífica a Ara Robles por estar pendiente en todo momento y el apoyo brindado a los calambres que inevitablemente aparecieron en mis piernas, jajajaja.
Gracias Cámara Rodante por mantener este grupo solo por el amor a la bicicleta.
Saludos y nos vemos en la próxima.
Crónica por Juan José Galván
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